Qué sorda está la gente, gritar, hablar, expresarse cada vez es más inútil; nadie escucha.
Como diría Soda Stereo: "estamos al borde de la cornisa, casi a punto de caer." Tal cual lo describe la canción, estamos llegando al punto máximo de nuestra existencia, el mundo, la Tierra grita auxilio, el universo pide PAZ. Sin embargo, un efecto dominó comienza desde los pequeños suburbios a infectar las calles con un claro mensaje: vivamos de utopías, de sueños por hacer; miremos nuestro alrededor, algo no anda bien.
¿Qué nos está pasando Sociedad? ¿Cuál es nuestro límite? ¿Lo estaremos conociendo? ¿Será necesario conocerlo?
Lo que digo es claro, la vida es una sola, no tenemos margen de error, es ahora o nunca, que sea ahora, que sea ya, el cambio es hoy.
Luchar por un mundo mejor es nuestra responsabilidad.
Quienes quieran ir en detrimento de la voracidad inconclusa se muchos, será su desafío.
El justo repudio de la ambición desmedida, tendrá que ser el objetivo central, para lograr tiempos mejores.
¿Estaremos a la medida del progreso? ¿Podremos enfrentarlo? No lo sé... la verdad no es absoluta es relativa... ¿o será que la verdad absoluta es que todo es relativo?
En fin, el que no arriesga, gana. Arriesguemos, tiremos las cartas dejemos que sea lo que tenga que ser y ganemos el proceso de nuestra existencia, la satisfacción de saber que lo intentamos, encontremos nuestra propia identidad, luchemos por la equidad, por descentralizar los esquemas verticales. Los unicatos no sirven más, quedaron obsoletos. Hagamos saber que el esto no da para más, que así no queremos vivir más.
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